La sensibilización, educación y la formación científica deberían ser metas integrantes de cualquier programa de cría para la conservación. Los programas de educación y sensibilización deberían dirigirse hacia conseguir un cambio de las actitudes que contribuyen a la destrucción de especies y de hábitats. Uno de los puntos fuertes de los programas de cría para la conservación es que atraen la atención del público, particularmente si el animal es carismático y atractivo. Este es el caso del lince ibérico. Uno de los objetivos importantes del programa de cría es concienciar a la sociedad sobre la importancia de conservar hábitat para asegurar el futuro de esta especie. Criar y mantener linces en cautividad sin la esperanza de poder devolverlos un día a la naturaleza sería como mantener un muerto viviente sin esperanza de recuperación. Aprovechando la atención mediática que recibe el lince ibérico, el programa de cría aporta apoyo y reconocimiento constante a la importancia primordial del trabajo de conservación in-situ.
A nivel formativo el Programa de Conservación Ex-situ publica periódicamente un boletín informativo sobre aspectos de interés, participa en conferencias y seminarios sobre conservación y cuenta con un programa de voluntariado que da la oportunidad a los futuros profesionales de la conservación a dar sus primeros pasos en este campo. Asimismo, una de las herramientas más importantes con las que cuenta el Programa para cumplir con los objetivos de divulgación es esta propia página web, a través de la cual se informa constantemente de acontecimientos relevantes, se publican documentos, manuales, artículos, fotografías y vídeos que permiten a la sociedad acercarse y conocer un poco mejor los fines del Programa de Conservación Ex-situ. Actualmente desde esta página, y gracias a la colaboración de la Estación Biológica de Doñana-CSIC, pueden verse también las imágenes en directo que se retransmiten desde el centro de cría El Acebuche, en el Parque Nacional de Doñana.